Opinión

 

• El mal ‘hábito’, del despojo
• La ‘cargada’, con Claudia Sheinbaum
• Cónclave de los ex gobernadores…
• Jesuitas, conceden gracia y favor, a Maru

 

El mal ‘hábito’, del despojo

En el momento en que Alejandra de la Vega Arizpe, ex titular de Innovación y Desarrollo Económico de Juárez, metió las manos y su interés en el proyecto del megadesarrollo del parque El Chamizal -ese que trabajó a modo, el ex titular de Desarrollo Urbano, Luis Felipe Siqueiros-, y que pretendió vender el exgobernador, Javier Corral, al gobierno federal, a poco más de un año de concluir su gestión gubernamental-, en ese momento se jodió, el ‘bienaventurado’ proyecto del Fideicomiso del Centro de Convenciones de El Chamizal.

El manoseado proyecto estaba de regreso a El Chamizal, el cual, hasta hace apenas unos años, había transitado prácticamente inadvertido, y sin la oposición mediática, popular y política de absolutamente nadie en Ciudad Juárez.

El proyecto encargado al presidente del Fideicomiso, el ‘personero’ de la familia de la Vega, Carlos Murguía Chávez, caminaba literalmente, sobre ruedas.

Pero ¡qué ironía!, porque fue precisamente la empresaria Alejandra de la Vega, quien, en su afán de amasar intereses, ‘despertó’ a los diversos grupos opositores y de defensa de El Chamizal, hasta llevar el asunto al jefe del Ejecutivo Federal y a los Tribunales;

Entre algunos de los muchos factores que finalmente terminaron pesando en la decisión y dictámenes de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), para arrebatar la intención que mantenía un grupo de empresarios para hacer realidad y construir finalmente un pomposo Centro de Convenciones en los ‘hoyos’ del histórico parque.

Y ni modo que, en el trasfondo de la vertiente final, no se haya considerado una decisión política que fue arropada por una serie de consideraciones técnicas y de origen natural sobre lo que fuera el famoso cauce natural de aguas.

Pero debo confesarles carísimos lectores, que, sin embargo, El Chamizal, esa amplia superficie de 333 hectáreas que fue devuelta a México por el gobierno de los Estados Unidos, tras el fallo de un tribunal de arbitraje en un litigio internacional que duró cien años, se convirtió en un área que con el paso de los años fue prontamente depredada por la cúpula del poder empresarial y política de Ciudad Juárez.

Fue así como, se decidió construir un estadio de fútbol en el gobierno de Manuel Bernardo Aguirre, que fue entregado para actividades deportivas de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ) y que ha sido ‘capitalizado’ y usufructuado por el equipo de fútbol, del cual es propietaria Alejandra de la Vega.

Un parque nacional, al cual el ex presidente de México, Luis Echeverría Álvarez le cercenó una parte del ‘cuerpo’ con la entrega de terrenos para la construcción del Instituto de Ciencias Sociales y Administración, que mantuvo con cargo al gobierno José López Portillo y que decidió ‘aventar’ con la crisis económica el también ex presidente, Miguel de la Madrid.

Se lo entregó al gobierno de la ciudad, y el resto de la historia con los siguientes movimientos con otras superficies en las que incluso participó la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) y el usufructo de los ‘hoyos’, a cargo de los comodatos, es parte de la historia ventilada que usted ya conoce.

Desde aquellos años, en que gobernaba José López Portillo (1976-1982), los ricos de Juárez pidieron “regalado”, y compraron a precios de verdadera ganga, los terrenos que fueron producto de la permuta del Programa Nacional Fronterizo (PRONAF) al Nervión, y que dieron pie, ¡bingo!, a lo que ahora conocemos como los ‘imperios’ de las cámaras empresariales de Ciudad Juárez.

Cámara Nacional de Comercio (CANACO) y Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA), entre los organismos privados que fueron utilizados en su momento por el poder empresarial en la ciudad, que guardaron silencio y que sacaron ventaja de las muchas negociaciones que se tejieron con el gobierno federal.

También aparece en esa historia de ‘despojo’ de los terrenos, las ‘negociaciones’ y la petición hecha en su momento por el propietario del periódico El Diario, Osvaldo Rodríguez Borunda, otro de los presuntos beneficiados por el sistema.

Sobre esa superficie que ahora ocupa el impreso, a escasos metros de la avenida Paseo Triunfo de la República, Osvaldo construyó el ‘imperio’ del entonces llamado cuarto poder.

No hubo jamás concesiones ‘gratuitas’ para la alianza tejida entre los gobiernos y el ‘mundillo’ empresarial de Ciudad Juárez.

Rodríguez Borunda siempre supo para qué era el poder de la información.

Y eso lo saben a detalle, muchos de los exgobernadores que han transitado en la historia política de Chihuahua y que han ocupado un espacio en la silla de Palacio.

En esa sucesión de actos de omisión, negligencia y en algunos casos de ‘abuso’ en torno al parque El Chamizal, abandonado y depredado, en la década de los ochenta, los estudiantes de la desaparecida Escuela Superior de Agricultura Hermanos Escobar (ESAHE) entraron al rescate urgente de El Chamizal para salvar muchos árboles. Muchos más murieron.

La historia la debe conocer como nadie Cuauhtémoc Reyes Castro.

El mal ‘hábito’ del despojo por parte de la cúpula del poder empresarial, ha sido la indiscutible constante para comprender una vez más el fracaso del multicitado proyecto del Fideicomiso del Centro de Exhibiciones y Convenciones del Chamizal.

Y ellos, los empresarios, tienen mucho que explicar.

 

La ‘cargada’, con Claudia Sheinbaum

La ‘cargada’ oficial del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador va con Claudia Sheinbaum como la presunta candidata del partido de Morena en la sucesión presidencial de 2024.

El grupo que representa los intereses del presidente de México, no le conceden absolutamente nada ni a Marcelo Ebrard, como tampoco a Adán Augusto López, y mucho menos al senador Ricardo Monreal Ávila, a quienes consideran muy ‘susceptibles’ de entrar en las negociaciones, en la urgente lealtad e institucionalidad que demandan gobierno y partido.

La campaña que se carga la jefa del gobierno de la Ciudad de México, que ya llegó a Ciudad Juárez de la mano del ex presidente interino del partido de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, para promocionar en el estado panista de Chihuahua a Claudia Sheinbaum, es el inicio de una larga ‘cruzada’ en la intentona de la 4T para darle continuidad al proyecto político del presidente de México.

El personero de Sheinbaum, que vino a Chihuahua para ‘medirle el agua a los camotes’, estuvo escoltado el ex diputado local, Miguel Ángel Colunga Martínez, por la diputada federal de Jalisco, Laura Imelda Pérez y por la síndica del gobierno de la ciudad, Esther Mejía, que solo cumplió con la tarea encomendada por el alcalde Cruz Pérez Cuéllar.

Los morenistas y seguidores de Claudia no cambian el ‘script’ que mantiene, por cierto, el jefe del Ejecutivo en las mañaneras. Plantearon un resumen de logros y méritos de la jefa de gobierno de la Ciudad de México.

Claudia Sheinbaum estará en las próximas semanas en Ciudad Juárez.

Después de la reunión informativa con la militancia y la raza de los medios de comunicación, que cuestionó severamente los resultados de la 4T y del gobierno federal en materia de seguridad, los seguidores del proyecto del presidente, creen ciegamente que no habrá otra opción.

Que Claudia Sheinbaum será erigida como la candidata presidencial en la elección interna, y que Marcelo Ebrard y Ricardo Monreal, podrán mantener aspiraciones y cargos en el hipotético gobierno de la ahora jefa de la Ciudad de México.

Existe una ‘apuesta’ a la institucionalidad, disciplina y unidad del partido político de Morenas que no tiene por ahora parangón.

Piensan que Marcelo Ebrard puede continuar como canciller o como futuro Secretario de Gobernación, y que el senador Ricardo Monreal puede ser un imbatible candidato al gobierno de la Ciudad de México.

Ambos en la justa de la decisión presidencial de 2030, después de que Claudia Sheinbaum, afirman, se convierta en la primera presidenta de la nación.

 

Cónclave de los ex gobernadores…

La gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván sigue jugando con el ‘librito’ de la política.

Su apuesta por un gobierno coaligado en Chihuahua, que ha dado arropo a gente identificada con el PRI y PRD, partidos que la apoyaron al final de la campaña política de 2021, le sigue generando espacios de interlocución política en la búsqueda de las soluciones a los no pocos problemas de inseguridad en el estado.

Esa fue la razón por la que la mandataria estatal decidió llamar a los ex gobernadores de Chihuahua, Fernando Baeza Meléndez y Patricio Martínez García, y también al ex gobernador de Oaxaca y ex secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco Altamirano -que renunció al PRI en 2005-, y que fue apoyador de la campaña del ex presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, y también ex diputado federal plurinominal por el PAN y presidente de la Comisión de Gobernación en la LX legislatura en San Lázaro.

Es decir, un panista con pasado priísta, que hizo olvidar a otro ex gobernador que estuvo ausente en el ‘ritual’: Francisco Barrio Terrazas, igualmente, con un pasado ligado a los empresarios identificados con el PRI, antes de que fuera lanzado a la candidatura de presidente municipal de Ciudad Juárez en 1983 con las siglas del PAN.

Allí en el cónclave de Palacio, los ex gobernadores sostuvieron una reunión para abordar los espinosos temas de la seguridad pública, que amenaza de nueva cuenta por vulnerar al gobierno de Chihuahua, como sucedió en los tiempos de otro exgobernador, ausente también, por cierto, Reyes Baeza Terrazas (2004-2010).

Fueron sentados en el ‘banquillo’, como si fueran sentenciados, los dos responsables de la seguridad en el estado. El Fiscal, Roberto Fierro Duarte y el Secretario de Seguridad Pública Estatal, Gilberto Loya.  

Ya lo sabe, los planes y decisiones relacionados con la inseguridad en diferentes zonas del estado, son ‘top secret’. ‘

Y allí mismo dicen, se tejió el ‘acuerdo’ de una buena relación y negociación con la Iglesia, después de los sucesos violentos de Cerocahui, que le endilgan al Fernando ‘El Católico’, y sus oficios de interlocución con gente de la alta jerarquía eclesiástica.

Van por la apuesta de la participación ciudadana, aquella estrategia que le salvó en Chihuahua, el pellejo al ex presidente Felipe Calderón y a su esposa Margarita Zavala, cuando estos fueron interpelados y señalados como “no bienvenidos” en una reunión celebrada en Ciudad Juárez con motivo de la masacre de Villas de Salvárcar, donde fueron acribillados jóvenes estudiantes y deportistas que participaban de una fiesta durante la noche del pasado 30 de enero de 2010.

Vendrán en los siguientes días acciones que tienen que ver con la seguridad y con la participación de la sociedad, a la que emboletarán con estrategias para hacerle frente al grave problema de inseguridad en el estado de Chihuahua.

El “robustecimiento de la participación ciudadana”, como le llamó la gobernadora a las estrategias, programas y proyectos que se han alineado al sector productivo, a las instituciones educativas y a la sociedad civil organizada.

Ya lo sabe, si se saca al ‘buey de la barranca’ y se reducen los índices de la violencia, será un triunfo para el gobierno, y si se fracasa en la intentona del proyecto para la seguridad, será el fracaso de todos.

 

Jesuitas, conceden gracia y favor, a Maru

De ‘fábula’, la esperada misa de despedida de los clérigos jesuitas asesinados en la parroquia de Cerocahui en el municipio de Urique.

La comunidad Jesuita ‘transó’ con los gobiernos locales y terminaron por echarle la culpa y responsabilidad de los homicidios al gobierno del presidente de México, Andrés Manuel Lopez Obrador.

Los ortodoxos y los Jesuitas, le echaron la aburridora al presidente y a los magros resultados de sus hombres de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano, que no han funcionado en el proyecto de la seguridad.

Incluso, la comunidad jesuita llamó a un “diálogo nacional” para detener el “rio de sangre” que corre por el país. Una exigencia a ‘media voz’, para que las autoridades cumplan con su vocación y deberes.

Quien se haya aventado la operación con los hombres de la Iglesia, sea con la ayuda de los ex gobernadores o sin ella, como se presume, fue un ‘tirazo’ en favor de la gobernadora panista María Eugenia Campos, a quien los clérigos le han firmado y entregado un nuevo ‘cheque en blanco’.

Todo el crédito en materia de seguridad, sin mencionarlo textualmente, para la gobernadora de Chihuahua.

Las culpas todas, del presidente de la República, a quien recomiendan revisar su proyecto de seguridad, y no olvidar a los 100 mil desaparecidos en todo el país durante los últimos 58 años.

Un evento que “lamentablemente no es aislado en nuestro país”, un país invadido por la violencia y por la impunidad”, salió a decir y a dar la cara el sacerdote Javier Ávila, líder de la comunidad jesuita en Cerocahui, cuyas palabras reprodujo el periódico Reforma.

El exgobernador de Chihuahua, Javier Corral, amigo y protector de muchos de ellos (los sacerdotes presentes) tampoco la cree.

El mensaje de la homilía del padre en la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, una verdadera fábula en el surrealismo que vive México.

Por alguna razón, al menos por el momento, los sacerdotes jesuitas no quisieron broncas. Se acobardaron.

En medio de la ironía, los desaciertos y el pusilánime mensaje a los presentes en la ceremonia religiosa del pasado sábado en la capital, para recordar la vida de los sacerdotes, Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar, el padre Ávila todavía se aventó el ‘tiro’ de decir a los feligreses que “los abrazos ya no nos alcanzan para cubrir los balazos”.

Quiere suponer este periodista, que, de la mano de los propios Jesuitas, Dios le ha concedido gracia, favor y nuevo crédito a la gobernadora de Chihuahua, Maru Campos.

Entonces, que el ‘Cielo bendiga a Chihuahua’, como dijo una y otra vez el ex gobernador priísta César Duarte.