Es un problema de los hospitales estatales, del IMSS y del Issste y se enfrenta de manera coordinada contratando médicos generales que son instruidos y dirigidos desde la misma línea de batalla.
Asi es como aceptó el gobernador Javier Corral Jurado que el problema que se tiene en el Sistema Estatal de Salud es la falta de personal médico y principalmente especialistas para las áreas de cuidados intensivos de COVID-19, no de camas ni de ventiladores, porque en Chihuahua se tienen 720 respiradores entre todos los servicios hospitalarios.
El gobernador Javier Corral agregó que el problema que tiene Chihuahua en las unidades médicas, no es ni la falta de camas ni de ventiladores, sino de personal médico, porque los que siguen en la primera línea de la batalla contra el COVID-19 están ya muy agotados.
Señaló que ya son muchos meses de estar atendiendo la pandemia y muchos de ellos necesitan un descanso, además porque hay lamentablemente muchas bajas en términos de inhabilitación por contagio, incluso de varios de los directivos de los hospitales reconvertidos.
Por ello se está contratando nuevo personal y sobre todo para ciertas áreas como las de cuidados intensivos, pero no ha sido una labor fácil y no se está encontrando a esos médicos.
Lo que hacemos entonces, comentó, es contratar médicos generales que puedan ser guiados, conducidos, orientados por especialistas intensivistas e incluso con la utilización de uso de tecnología, con mecanismos como el uso de tablets para conducirlos desde afuera de las áreas restringidas de COVID-19 en las unidades médicas.
“Es ahí donde nosotros tenemos la preocupación, cuando nos falta personal no podemos atender todos los casos que están llegando a los hospitales y darles la atención que se requiere”, insistió.
Queremos, dijo, bajar el nivel de contagio lo más que se pueda en estos 19 días en que se ha decretado como semáforo rojo en el estado de Chihuahua.